Ciertamente, quedamos impactados ante las consecuencias que dejó el paso del #HuracanEta por nuestro país en los primeros días de noviembre. Las imágenes que hemos podido ver por los medios de comunicación y por las redes sociales dejan ver cómo la fuerza de la naturaleza embiste con ímpetu, así como el esfuerzo de los rescatistas por salvar vidas y mitigar el saldo adverso de pérdidas materiales y humanas.
Sin embargo, aun cuando no hemos terminado de pasar los efectos del huracán Eta, aliviados al desviarse el #HuracanTheta y al pendiente del avance del nuevo #HuracanIota, que al momento de redactar esta entrada del blog, está por entrar al istmo centroamericano por #Nicaragua convertido en categoría 5, reflexionemos un poco en cuanto al papel que desempeñamos los ingenieros ante las circunstancias que nos presenta un desastre natural de este tipo, específicamente, tormentas y huracanes con las consecuentes inundaciones y deslizamientos.
El esfuerzo de toda la ciudadanía, en especial aquellos que son profesionales en su respectivo campo del saber, y muy particularmente, aquellos formados en ciencias de la #Ingeniería, debemos utilizar toda nuestra capacidad, conocimiento y experiencia, para acompañar el liderazgo de la reconstrucción de las áreas devastadas por los recientes fenómenos atmosféricos así como en la creación de estrategias que permitan prevenir y mitigar con mayor celeridad y eficiencia, sus destructores efectos.
Con mis compañeros colegas, Juancho Amado y Eric Martínez, tenemos un webcast semanal intitulado #EnConcreto vía #Zoom, en el que abordamos diferentes temas del acontecer nacional, vinculados con el área de la Ingeniería y la #Arquitectura y hacerlas de conocimiento general, incluso para el que es lego en la materia. En dicho webcast, que también transmitimos en nuestro canal de YouTube, examinamos este tema y llegamos a las siguientes conclusiones, acciones inmediatas que deberían realizarse, las cuales comparto con los dilectos lectores de este blog.
1. Encauce de aguas de los ríos principales
Se debe considerar encausar las aguas de los ríos principales de los sitios afectados, en especial, el río Chiriquí Viejo, ampliando su cauce y proponiendo un material en las paredes y fondo del encauce, de tal forma que sean compatibles con su entorno natural y contribuya a reducir la energía que trae el flujo. Esto sería para controlar las aguas y requerirán de un estudio hidrológico e hidráulico basados en datos de campo y meteorológicos así como la elaboración de modelos necesarios para su dimensionamiento.
2. Reconstrucción de taludes y pendientes
También habrá que estudiar los taludes y las pendientes que aún permanecen invariables o sin muchas alteraciones, ya que estarían saturadas y podría romperse el ángulo de reposo. El concurso de #geotécnicos y #geólogos será importante en esta labor para encontrar soluciones que permitan mantener y proteger los taludes y reconstruir los que han cedido.
3. Rehabilitación de vías de acceso
Reabrir las comunicaciones con los diferentes poblados y asentamientos humanos, aislados por los deslizamientos que destruyeron las vías terrestres, es imperativo para, en primera instancia, enviar ayuda y, posteriormente, reactivar la producción agrícola en el “granero de Panamá”, como se le conoce a la altiva provincia chiricana. Seguramente, habrá que revisar los requerimientos técnicos viales para acomodar las vías a carreteras y caminos propicios para la montaña, verificando las pendientes así como las especificaciones de las estructuras de drenaje lineal y transversal de las vías. Indudablemente, el uso de nuevas tecnologías geotécnicas y la escogencia del material de rodadura, será crucial en este asunto.
4. Rehabilitación de utilidades básicas
No menos importantes son las obras para la reactivación del suministro de agua potable y energía, las cuales sin duda habrá que ejecutar para atender a la población que reside y produce en los sitios afectados, sin dejar por fuera, la recolección de las aguas residuales y las obras para la captación y manejo de las aguas lluvia. Interesante alternativa sería la de la captación de estas aguas mediante tanques individuales o comunales para su reutilización.
Estas serían algunas de las primeras acciones que propusimos en nuestro webcast y que requerirán el concurso de los profesionales de la Ingeniería, tanto por nuestra formación, como por nuestra vocación. Por supuesto, que toda acción que se proponga para modificar la condición en que quedaron los ríos, suelos o las vías de acceso, deberán ser compatibles con la práctica medioambiental responsable y considerar siempre la seguridad de las personas involucradas. En otra entrada a este blog, haremos referencia a cómo podríamos llevar a cabo las propuestas que hemos plasmado en este texto.
A continuación, el episodio número 25 de #EnConcreto abordando el tema "Desastres Naturales, El Rol de la Ingeniería".